Economía gris: preocupación en el sistema financiero por el auge de transferencias inmediatas

El uso del efectivo en Argentina sigue en retroceso, pero el fenómeno no implica necesariamente más formalidad en las operaciones. Los pagos inmediatos entre personas mediante billeteras virtuales crecen a gran velocidad y configuran lo que especialistas llaman una “economía gris”. Comercios de barrio, compras online y hasta servicios profesionales ya se resuelven con un simple alias, sin comprobantes ni facturación.

Según datos del Banco Central, a junio el número de transferencias inmediatas aumentó un 20% interanual y los montos un 34%. Tres de cada cuatro operaciones estuvieron vinculadas a una Clave Virtual Uniforme (CVU), es decir, a billeteras no bancarias. En contraste, el uso de la tarjeta de débito cayó más de un 26% en cantidades y un 21% en montos durante el mismo período.

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Los indicadores coinciden con reportes privados como el índice Payway, que mostró una menor necesidad de efectivo y una baja en extracciones de cajeros. “Se realizan menos extracciones gracias a la disponibilidad de billetes de mayor denominación y la suba de los límites de extracción”, explicó el informe. El cambio en los hábitos de pago ya es visible en la vida cotidiana.

En Ualá confirmaron que el 85% de las operaciones de sus usuarios se realizan vía transferencias inmediatas. Desde la firma resaltaron: “Funcionan con una lógica informal, ya que es directa entre las personas, sin comprobantes ni seguimiento”. La empresa agregó que uno de cada seis clientes ya utiliza pagos con tarjeta desde el celular.

El problema para el sistema financiero es la dificultad para medir qué parte de los 60 billones de pesos que circulan mensualmente por transferencias responden a consumos que deberían ser declarados. Las operaciones creadas para dividir cuentas entre amigos ahora sirven también para cobrar productos o servicios sin facturación.

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Distintas fuentes del sector señalan que abrir una CVU en una fintech es mucho más sencillo que en un banco, lo que amplía la posibilidad de canalizar ingresos no declarados. “Muchos comercios o profesionales cobran a cuentas personales, lo que reduce la emisión de facturas y el cruce con AFIP”, advirtieron.

Las entidades reconocen que no se trata solo de operaciones de baja escala. Una ejecutiva subrayó: “No nos preocupa la verdulería de la esquina, lo que nos tiene alerta son los grandes sitios de ecommerce que permiten transferencias con descuentos de hasta un 20%”. Plataformas como Mercado Libre o Tienda Nube ofrecen sus propias billeteras, pero aplican comisiones según la velocidad de acreditación.

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En este escenario, bancos y fintechs ya elevaron planteos al Banco Central. “Queremos que se evalúen alternativas para mejorar la transparencia y reducir las asimetrías entre medios de pago”, remarcaron desde el sector. La digitalización avanza, pero la sombra de la informalidad marca un nuevo frente de debate.

Fuente: Diario Clarín