Polémica: Absolvieron a los directivos de Conarpesa acusados por daño ambiental
Actualidad25/08/2025
REDACCIÓN
Fiscalía Puerto Madryn
El veredicto se conoció este lunes al mediodía y cerró un juicio seguido de cerca por sectores ambientales, vecinos de la zona y la industria pesquera. La magistrada resolvió absolver a los dos acusados, que habían llegado a la instancia oral señalados como responsables del vertido de líquidos sin tratar en aguas del Golfo Nuevo.
La causa se había iniciado en 2023 tras la difusión de un video que mostraba un efluente de color naranja descargándose al mar. Ese registro, que circuló rápidamente en redes sociales, motivó la intervención de organismos de control y abrió una investigación judicial.
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Durante las primeras inspecciones, autoridades de Ecología, personal policial y especialistas de Policía Científica descubrieron un caño enterrado que funcionaba como una vía clandestina para desviar los efluentes. El conducto, según se acreditó en el expediente, no estaba habilitado y operaba por fuera de los sistemas declarados oficialmente.
La hipótesis de la Fiscalía apuntó a que la empresa había instalado un “by-pass” irregular que permitía que los líquidos crudos fueran volcados al mar sin pasar por el tratamiento exigido por la normativa vigente. Para los investigadores, la maniobra constituía una práctica sistemática de contaminación.
Los informes periciales confirmaron la gravedad de la descarga. Los técnicos determinaron que los líquidos vertidos superaban ampliamente los parámetros legales: 21 veces más en sólidos suspendidos, 60 veces más en Demanda Biológica de Oxígeno, 25 veces más en amonio y 2.700 veces más en coliformes fecales.
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En el juicio estuvieron imputados Nadine Parry, jefa ambiental de la empresa, y Yosef Vargas, jefe de planta de efluentes, señalados como responsables directos de la operatoria de la descarga. Ambos enfrentaban acusaciones por contaminación ambiental en grado de autoría.
El debate comenzó el lunes 11 de agosto y se extendió durante varias jornadas. Tras la exposición de pruebas y testigos, los fiscales pidieron condenas de cumplimiento efectivo: 3 años y 6 meses para Parry y 3 años y 3 meses para Vargas, mientras que la defensa solicitó la absolución bajo el principio de “beneficio de la duda”.
Los abogados particulares argumentaron que no se había probado de manera contundente la responsabilidad personal de sus defendidos y cuestionaron la forma en que se recolectaron algunas pruebas. Este planteo fue finalmente aceptado por la jueza Reyes, que dictó la absolución de ambos.
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La resolución generó sorpresa en sectores ambientalistas y también en los vecinos de la zona, que esperaban una sanción ejemplar. El fallo fue recibido con preocupación por parte de quienes siguen de cerca la problemática de la contaminación industrial en la región.
La Fiscalía, en tanto, no tardó en manifestar su desacuerdo y anunció que impugnará el fallo para que sea revisado por el Superior Tribunal de Justicia. El objetivo será lograr que la absolución quede sin efecto y que los imputados enfrenten nuevamente el proceso judicial.
Con esta apelación, la causa seguirá abierta y quedará bajo análisis de la máxima instancia judicial provincial. El desenlace dependerá de cómo evalúen los jueces superiores la valoración de la prueba realizada en el juicio oral.
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