Nisman: imputan a Fein por la escena del crimen, pero dijo que fue por investigar a los servicios
Policiales28/08/2025
REDACCIÓN
Exfiscal Fein y Nisman
La justicia federal imputó a la ex fiscal Viviana Fein y al juez Manuel De Campos por graves irregularidades en la escena del crimen, ocurrida el 18 de enero de 2015 en el departamento del piso 13 de las torres Le Parc, en Puerto Madero. El fiscal Eduardo Taiano sostiene que el procedimiento inicial estuvo marcado por fallas que impidieron asegurar pruebas vitales para esclarecer el caso.
La denuncia contra la entonces presidenta Cristina Kirchner por el encubrimiento de los acusados del atentado a la AMIA había sido presentada por Nisman cuatro días antes de su muerte. El hallazgo del cuerpo con un disparo en la cabeza derivó en una investigación plagada de polémicas. En apenas diez horas, 88 personas pasaron por el lugar, lo que comprometió de forma irreversible la recolección de evidencias.
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Las imputaciones ya alcanzaban al ex secretario de Seguridad Sergio Berni, a su colaborador Darío Ruiz y a los ex jefes de la Policía Federal y Prefectura. Ahora, con Fein y De Campos bajo investigación, el cerco judicial se amplía sobre todos los responsables de aquella noche, desde la política hasta las fuerzas de seguridad que participaron del procedimiento.
El fiscal Taiano describió que la actuación de los magistrados “impactó de manera directa en el curso de la investigación del homicidio”. Según su dictamen, las irregularidades fueron consentidas o toleradas por funcionarios que debían garantizar la preservación del lugar. Como prueba, el expediente remarca un dato insólito: en el departamento no apareció ninguna huella de Nisman, pero sí de un prefecto encargado de custodiar la escena.
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El descontrol fue advertido incluso por especialistas. El perito Osvaldo Raffo, referente histórico del Cuerpo Médico Forense, calificó la situación como la acción de “una manada de búfalos”. La ausencia de controles permitió incluso que vecinos circularan libremente por el edificio en las horas posteriores al hallazgo, sin que nadie los detuviera en accesos ni ascensores.
Otro de los puntos críticos se centró en el accionar del entonces secretario de Seguridad. Los registros telefónicos revelaron que Sergio Berni mantuvo 31 comunicaciones con la presidenta Kirchner esa madrugada, cifra muy superior a la reconocida en su declaración testimonial. Cinco de esas llamadas se produjeron mientras se encontraba en el departamento, lo que acrecienta las sospechas sobre su intervención directa en el operativo.
La escena mostró episodios de alto impacto: funcionarios sentados en la cama del fiscal, otros en los sillones del living y hasta la limpieza de la pistola con un pedazo de papel higiénico. El prefecto encargado del dormitorio admitió que no pudo impedir el ingreso de políticos y agentes de seguridad al lugar donde yacía el cuerpo.
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Con las nuevas imputaciones, la investigación también avanza hacia otra línea sensible: la eventual participación de los servicios de Inteligencia del Ejército, que en ese momento estaban bajo el mando del general César Milani. Ya se emitieron las primeras citaciones a oficiales y agentes civiles, que superarán las 90 convocatorias en total.
La ex fiscal Fein se defendió afirmando que fue apartada cuando buscó indagar sobre los servicios de Inteligencia. Mientras tanto, la causa vuelve a quedar bajo el foco público. Diez años después de aquella noche, la justicia intenta desentrañar si las irregularidades fueron descuidos o acciones deliberadas para desviar la investigación.
Fuente: Diario Clarín, X
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