Crisis educativa: solo el 70% de los estudiantes llega al último año de secundaria

Los datos del 2024 sobre la trayectoria educativa de los adolescentes en Argentina exponen un panorama preocupante: apenas el 10% de quienes iniciaron la primaria en edad teórica llegó al final de la secundaria con aprendizajes suficientes en lengua y matemática. La estadística, analizada por Verónica Cipriota, directora ejecutiva de Enseña por Argentina, durante una entrevista en el programa El Quinto Poder por #LA17, desnuda la magnitud del problema y al mismo tiempo abre una ventana de oportunidades para mejorar.

Entre el 60% y el 70% de los estudiantes alcanzan el último año de secundaria en tiempo y forma, pero la calidad de lo aprendido no es la esperada. Según explicó Cipriota, “de los chicos que llegaron a sexto año, los que efectivamente lo hicieron con aprendizajes suficientes son apenas 10 de cada 100”. El contraste muestra que la cobertura educativa no garantiza logros académicos adecuados, y que hay un vacío enorme en el plano de la matemática, mientras lengua logró una recuperación parcial tras años de retroceso.

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La pandemia ocupa un lugar central en esta radiografía, porque coincidió con los primeros años de la secundaria de esta cohorte. Fueron los años de mayor necesidad de acompañamiento para establecer vínculos con familias y estudiantes, y sin esa base de contacto las posibilidades de abandono crecieron. “Estamos evaluando a una generación marcada por la pandemia, y en Chubut además se sumaron interrupciones prolongadas de clases”, recordó la referente educativa. Este fenómeno explica en parte por qué muchos adolescentes no lograron sostener su escolaridad ni consolidar aprendizajes.

El contraste entre materias también es ilustrativo. Lengua muestra una mejora sostenida gracias a políticas específicas de lectura implementadas en provincias y a nivel nacional. En cambio, los resultados en matemática cayeron de manera abrupta. “La Argentina atraviesa una verdadera crisis en matemática, todas las provincias bajaron sus resultados en 2024”, subrayó Cipriota. En este punto destacó que Chubut puso en marcha un plan de formación intensiva: “hoy todos los docentes de matemática de la provincia se capacitan para revertir este escenario”.

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El papel de la escuela como espacio de contención vuelve a emerger en cada diagnóstico. No alcanza con que las aulas estén abiertas, pero sin presencialidad los aprendizajes se resienten de inmediato. “Los chicos aprenden cuando están en la escuela”, enfatizó Cipriota, en una síntesis que rescata la importancia de la regularidad. En Chubut, la reducción de la conflictividad docente en los últimos meses permitió recuperar días de clase y alimentar una expectativa de mejora, aunque los datos actuales todavía reflejan las secuelas de la discontinuidad.

El rol de las familias y de la comunidad educativa completa el cuadro. Cipriota insistió en que los preceptores cumplen un papel fundamental para revincular a quienes dejaron de asistir. “La escuela siempre espera a los chicos con las puertas abiertas”, expresó, remarcando que cada regreso requiere planes adaptados y un trabajo paciente de docentes y equipos de conducción. Además pidió que padres, madres, vecinos y referentes barriales transmitan un mismo mensaje: la escuela es prioritaria y la continuidad escolar es innegociable.

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El debate por la inversión en educación vuelve a cruzar el diagnóstico. La entrevistada advirtió sobre el impacto del presupuesto nacional y de la ejecución provincial. “Es doloroso ver que los recursos no se destinan como deberían”, sostuvo, y recordó que el 6% obligatorio no figura en el proyecto 2026. La falta de asignación y ejecución debilita las políticas de acompañamiento y limita las posibilidades de sostener programas de capacitación y fortalecimiento pedagógico.

Las experiencias internacionales demuestran que la mejora es posible si hay un compromiso integral. Países como Perú lograron avances notorios en poco tiempo al centrar la agenda social y política en la educación. Para Cipriota, esa es la dirección que debe tomar la Argentina: “No alcanza con acciones aisladas, toda la sociedad tiene que entender que la educación es la prioridad”.