
Mario Cimadevilla advirtió sobre la deuda, cuestionó a Milei y trazó un paralelismo con la crisis del 2001
Política30/09/2025
REDACCIÓN
En diálogo con El Quinto Poder, Mario Cimadevilla comenzó su reflexión destacando el rol de los gobernadores que, según afirmó, buscan ponerle límites a un Ejecutivo que intenta concentrar poder. “Me parece positiva la acción de los gobernadores frente a un gobierno que pretende avasallar las autonomías provinciales y que además profundiza la grieta como método de hacer política”, señaló al aire de #LA17. A su juicio, la creación del bloque de mandatarios provinciales apunta a cambiar la lógica de confrontación permanente.


En ese sentido, explicó que los gobernadores impulsan lo que denominaron “Camino de las Provincias”, con el objetivo de generar consensos básicos. “Se trata de construir un escenario distinto, que deje de lado el odio al otro y que instale la necesidad de solidaridad entre todos los argentinos”, remarcó Cimadevilla.
El exsenador aseguró que observa con preocupación la situación actual por las similitudes con el 2001. “Este modelo económico ya fracasó en la Argentina: fracasó con Martínez de Hoz, fracasó con De la Rúa y ahora vuelve a fracasar con Milei. Se repiten recetas que nos llevaron a crisis muy profundas”, advirtió. Agregó que el discurso presidencial contrasta con la realidad: “Cuando Milei dice que los ingresos se multiplicaron en dólares y que los argentinos estamos mejor, yo no sé de qué país habla, porque lo que veo es consumo cada vez más reducido”.
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Cimadevilla fue enfático sobre la pérdida de poder adquisitivo. “Hoy la gente no mira marcas, mira precios. La mayoría de los argentinos no llega a la mitad del mes, y mientras tanto el Presidente insiste en que la economía mejora. Es un desfasaje total entre lo que se predica y lo que se vive en la calle”, sostuvo.
El exfuncionario también cuestionó la credibilidad de las estadísticas oficiales. “El INDEC mide la pobreza solo por ingresos, sin tener en cuenta otros factores, y eso ya está siendo muy cuestionado. Cuando uno conversa con la gente, no encuentra a nadie que diga que vive mejor”, aseguró.
Otro eje central de la entrevista fue la deuda externa. “La deuda que tomó este gobierno ya alcanza los 330.000 millones de dólares. Son 6.600 dólares por habitante, una locura. Y lo más grave es que uno no ve dónde está esa plata: no está en la educación, no está en la salud, no está en infraestructura ni en vivienda. Es deuda que solo alimenta negocios financieros”, denunció.
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Cimadevilla señaló que el país transita un momento donde es necesario apelar a la sensatez. “Venimos de extremos: primero de izquierda, ahora de derecha. Ningún extremo funcionó. El camino es el del sentido común. Me preocupa que este gobierno no sea liberal, sino que tenga muchos rasgos de fascismo”, advirtió. A su criterio, la descalificación de cualquier pensamiento distinto es prueba de esa intolerancia.
La entrevista también derivó hacia la política internacional, particularmente el conflicto en Medio Oriente. “Nadie puede negar la lucha del pueblo israelí por tener un Estado, pero criticar al gobierno de Netanyahu no es ser antisemita. Hay que separar las cosas”, planteó Cimadevilla. Explicó que muchas reacciones sociales tienen origen en el sufrimiento del pueblo palestino y alertó sobre el crecimiento de discursos peligrosos.
El exsenador lamentó el saldo humano de la guerra. “Estamos hablando de más de 14.000 niños asesinados en Gaza y cientos de periodistas muertos. Eso genera reacciones comprensibles, pero no se puede permitir que desemboquen en expresiones antisemitas”, enfatizó. También recordó que la historia mundial dejó enseñanzas dolorosas sobre persecuciones étnicas y religiosas.
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Al ser consultado por los hechos recientes en la Argentina, Cimadevilla se mostró preocupado por el surgimiento de cánticos antisemitas entre adolescentes. “Son chicos, pero es necesario entender por qué surgen esas expresiones. No se puede justificar con lo que hace Netanyahu, pero sí debemos atender a las causas que generan este tipo de manifestaciones”, opinó.
Sobre el escenario político local, advirtió que los mensajes de Milei acentúan la polarización. “Cuando el Presidente dice ‘la Argentina avanza o se atrasa’ y descalifica cualquier otra propuesta, demuestra una visión totalitaria muy lejos de un régimen libertario”, señaló.
Finalmente, Cimadevilla insistió en la necesidad de una mirada de conjunto que priorice la paz social y el respeto institucional. “La unidad interna es indispensable para sostener la defensa del territorio y de la democracia. Los argentinos necesitamos recuperar sensatez y dejar atrás la confrontación vacía”, concluyó.








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