

La Bolsa de Comercio de Rosario proyecta una producción histórica de trigo para la campaña 2025/26. El informe estima 24,5 millones de toneladas, un récord absoluto que supera en 1,5 millones lo calculado hace apenas un mes. También se prevé un rendimiento promedio nacional sin precedentes, con 37,7 quintales por hectárea.


“Si la campaña 2021/22 fue una supercampaña, la actual será una megacampaña”, destacó la BCR en su último relevamiento. Los números confirman una tendencia alcista que atraviesa todo el mapa productivo: desde Buenos Aires hasta Córdoba y Santa Fe, los campos muestran rindes excepcionales y una cosecha que promete cambiar el balance agrícola del año.
Buenos Aires encabeza el ranking con un rendimiento proyectado de 40,8 quintales por hectárea, por encima de los 39,5 registrados en 2021/22. Córdoba sigue con 36,8 quintales, mientras que Santa Fe marca 42,2 quintales, el mayor valor de su historia reciente. En todos los casos, las marcas superan ampliamente los picos de la última década.
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La superficie sembrada ronda los 6,9 millones de hectáreas, según la entidad rosarina, que además detectó correcciones positivas en el área núcleo. Los técnicos atribuyen el salto de productividad a un conjunto de factores climáticos favorables: “Las lluvias inéditas de julio y agosto y las excelentes condiciones de llenado en la región pampeana fueron determinantes”, explicaron.
El repunte también abre expectativas en el comercio exterior. Con un mercado regional más ajustado, Brasil se perfila como destino central para las exportaciones argentinas. El país vecino produciría 7,3 millones de toneladas, por debajo del ciclo anterior, y necesitaría importar cerca de 7 millones, gran parte provenientes del campo argentino.
“Tenemos una gran oferta de trigo en la región, especialmente desde Argentina, que por segundo año consecutivo superará los 20 millones de toneladas”, destacó el informe de la consultora Safras & Mercado. Esa combinación de abundancia local y demanda externa refuerza el optimismo de los exportadores.
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La mejora en los rindes también impactará en el ingreso de divisas. La BCR proyecta una liquidación de USD 2.600 millones entre noviembre y diciembre, cifra que se sumará a los USD 34.500 millones ya registrados en los primeros diez meses del año.
Con estos números, 2025 cerraría como el tercer mejor año histórico en liquidación agroexportadora, detrás de 2021 y 2022, cuando los precios internacionales se dispararon por la guerra entre Rusia y Ucrania.
Para el primer trimestre de 2026, la proyección ronda los USD 5.250 millones, una cifra apenas menor al promedio de los últimos cinco años. Según el informe, esta baja se debe al adelantamiento de operaciones y a la espera de la nueva cosecha, que promete sostener el ritmo de ingresos durante todo el año.

















