
Preocupa el bajo empleo femenino en el Valle por cifras que golpean a las más jóvenes
Enfoques10/12/2025
REDACCIÓN
La situación económica de muchas mujeres del Valle fue expuesta en un análisis presentado por Sara Cuevas, quien repasó en #LA17 los números y la experiencia cotidiana de acompañamiento a familias en crisis. La referente describió un año atravesado por consultas vinculadas a violencia, falta de vivienda y pérdida de ingresos, un escenario que se sostiene en distintos barrios de Trelew y Rawson.


Cuevas explicó que el conglomerado Trelew–Rawson registró una desocupación del 5,7% en el primer semestre, un valor que figura entre los más altos del país. Agregó que los meses siguientes mostraron un incremento tanto del desempleo como de la informalidad, lo que profundiza la inestabilidad laboral en sectores que emplean mayormente mujeres. La dirigente remarcó que estos datos se reflejan en la demanda de asistencia que reciben durante todo el año.
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En relación a las brechas de género, sostuvo que el impacto no se distribuye de manera uniforme. Afirmó que las mujeres jóvenes, menores de 30 años, atraviesan “casi el 30%” de desocupación, un porcentaje que describió como “las tasas más altas del país”. Para Cuevas, esta situación condiciona el acceso a la autonomía económica y genera mayor dependencia en contextos familiares frágiles.
Durante la entrevista, señaló que los principales empleos femeninos en Chubut se concentran en servicios, salud, educación y tareas de cuidado. Indicó que estas actividades presentan baja estabilidad y salarios reducidos, lo que las vuelve especialmente sensibles a momentos de recesión. A esto sumó que el comercio, históricamente una fuente de empleos para mujeres, atraviesa un retroceso marcado: “Las primeras despedidas o perjudicadas son las mujeres porque también ha crecido la informalidad en el sector”, sostuvo.
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Otra de sus preocupaciones fue el incremento del endeudamiento, un fenómeno que observan en familias que recurren a créditos o tarjetas para cubrir gastos básicos. Cuevas fue contundente en este punto al marcar que “hoy se están usando las tarjetas de crédito para comprar alimento”, una práctica que, según explicó, marca la magnitud del deterioro económico en los hogares más frágiles.
Cuevas también vinculó la situación económica con distintas formas de violencia. Recordó que “los femicidios están ocurriendo cada 24 o 29 horas en Argentina”, pero aclaró que ese dato representa solo “la punta del iceberg”, ya que debajo de esa cifra se encuentran todas las violencias cotidianas que atraviesan a las mujeres y que se intensifican cuando existe dependencia económica o falta de recursos.
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La entrevista permitió dimensionar la combinación de factores que afectan al empleo femenino, desde la pérdida de puestos formales hasta el endeudamiento y la persistencia de las brechas salariales. Cuevas señaló que la problemática requiere participación institucional sostenida y un abordaje que incluya trabajo, igualdad y políticas de protección para mujeres de todas las edades.

















