Una joven de la meseta se recibió en minería y plantea volver con una mirada crítica y formada

Enfoques28/12/2025

Antonella Córdoba imagen generada digitalmente por LA17 foto original Facebook

El cierre de una etapa de estudio se transformó en noticia para la meseta chubutense cuando una joven oriunda de Gastre culminó su formación como técnica en operaciones mineras, luego de varios años de esfuerzo personal y académico fuera de su localidad de origen.

La protagonista es Antonella Córdoba, quien dialogó en el programa La Voz de la Meseta por #LA17 y relató el recorrido que la llevó desde su pueblo natal hasta Ingeniero Jacobacci, donde funciona el instituto en el que completó la tecnicatura. “El jueves pasado terminé mi tecnicatura superior en operaciones mineras y ahora ya esperando el título”, expresó, al contar que la carrera demandó más tiempo del previsto debido a la pandemia y a distintas situaciones personales que atravesó durante esos años.

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A pesar de residir en Río Negro desde hace más de un lustro, Antonella remarcó que nunca cambió su domicilio y sostuvo con claridad su vínculo con Gastre. “Todavía sigo teniendo mi domicilio en Gastre y no tengo ganas de cambiarlo, seguimos apostando a la localidad”, afirmó. Consultada sobre las razones que la llevaron a elegir esta formación, explicó que su interés no estuvo centrado solo en la actividad productiva. “Lo fundamental de esta tecnicatura para mí fue el trabajo social, entender por qué se presenta siempre el no a la minería y qué conflictos ambientales pueden surgir”, señaló.

En ese sentido, subrayó que la carrera le permitió una mirada amplia, que incluye lo social, lo ambiental y el vínculo entre empresa y comunidad. “No es como antes, que la empresa iba, sacaba el recurso y se iba. Hoy hay herramientas para informarse y exigir cómo se trabaja”, sostuvo. Al referirse a los debates actuales sobre la actividad, Córdoba remarcó la necesidad de información y participación comunitaria. “Uno como comunidad tiene que exigir, informarse, preguntar qué se va a hacer, cuánto suelo se va a remover y cómo se va a trabajar”, explicó durante la entrevista.

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También hizo referencia a la localización de los proyectos metalíferos y a la realidad territorial de la meseta. “La mayoría de estos proyectos están en lugares alejados de centros urbanos. En el caso de Navidad, está en la meseta, no afecta ríos ni turismo”, afirmó. Desde su experiencia en Jacobacci, mencionó el avance de proyectos de menor escala y aclaró que no todos implican grandes cantidades de empleo. “Es un proyecto chico, se toma lo justo y necesario, no es algo masivo”, explicó, aportando una mirada concreta sobre expectativas laborales.

Más allá del presente, su mensaje estuvo atravesado por el futuro y el arraigo. “Nunca perdí la fe de volver a Gastre, ejercer lo que soy y tratar de desarrollar la meseta, porque hoy la ganadería ya no queda y la sequía complica todo”, expresó con franqueza. La situación social de los pueblos pequeños también apareció en su relato. “La mayoría de los jóvenes se va, quedan empleados públicos y algunos comercios. La situación económica a veces te lleva a cerrar o mudarte”, describió, al hablar de Gastre, Gan Gan y otras localidades cercanas.

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Hacia el final de la entrevista, dejó un mensaje dirigido especialmente a los más jóvenes. “Traten de estudiar, formarse y, si pueden, volver a su lugar. Es muy lindo estudiar y volver a donde uno nació, creció y siente que pertenece”, dijo. Con 29 años, Antonella Córdoba cerró una etapa personal importante y abrió otra, marcada por formación técnica, mirada crítica y deseo de regresar a su territorio, una combinación que refleja las tensiones y expectativas que atraviesan hoy a la meseta chubutense.