EL VATICANO PERMITE LA BENDICIÓN DE PAREJAS DEL MISMO SEXO

En un histórico giro, el Vaticano, a través de la Congregación para la Doctrina de la Fe, ha emitido un documento que autoriza la "posibilidad de bendecir" a parejas en situaciones irregulares o del mismo sexo. Aunque reafirma que el sacramento del matrimonio es exclusivo entre un hombre y una mujer, este cambio en la postura supone un avance en la aceptación de la diversidad de relaciones afectivas.

Respuesta a demandas pastorales

El cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto de la Congregación, responde a demandas pastorales al indicar que se puede entender la posibilidad de bendecir a estas parejas sin convalidar oficialmente su status. Se destaca que las bendiciones no deben ser equiparadas al sacramento del matrimonio y que no deben realizarse simultáneamente con una unión civil ni con los rituales propios de una boda.

Este nuevo documento profundiza y desarrolla la respuesta preliminar que el papa Francisco ofreció a dos cardenales conservadores en octubre. En ese momento, Francisco sugirió que las bendiciones podrían ofrecerse en circunstancias específicas sin confundirlas con el sacramento del matrimonio. El texto reitera este razonamiento y subraya que la bendición no debe negarse a quienes buscan una relación trascendente con Dios.

Apertura sin equiparación

Aunque la Iglesia reafirma la enseñanza perenne sobre el matrimonio como sacramento entre un hombre y una mujer, la posibilidad de bendiciones para parejas en situaciones irregulares se presenta como una apertura pastoral. La definición de "bendición" se amplía en el documento, destacando que aquellos que buscan una relación con lo trascendental no deben someterse a un análisis moral exhaustivo para recibirla.

Este pronunciamiento marca un cambio respecto a la declaración de la Congregación en marzo de 2021, que afirmaba que la Iglesia católica no podía impartir su bendición a las uniones de personas del mismo sexo. La nueva "Declaración" lleva por título "Fiducia Supplicans: sobre el sentido pastoral de las bendiciones" y se presenta como un paso hacia una mayor inclusión y comprensión pastoral.

El documento aborda la importancia teológica de la bendición, explorando sus orígenes desde el Antiguo Testamento y las Escrituras. Se destaca que la bendición, como un acto de amor comunicado por Dios a través de Cristo, se convierte en inclusión, solidaridad y pacificación. Se enfatiza que debe alimentarse, no obstaculizarse, y que representa una conexión con la trascendencia y la misericordia en diversas circunstancias de la vida.