
Crece la cantidad de egresados docentes, pero el sistema educativo sigue sin absorberlos
Actualidad03/07/2025

En la última década, la cantidad de egresados de institutos de formación docente creció un 54%, pero la matrícula en los niveles inicial, primario y secundario sólo aumentó un 1%, generando un desfasaje que evidencia falencias estructurales en el sistema educativo. El informe “Institutos de formación docente”, elaborado por investigadoras del CONICET y de Argentinos por la Educación, analiza este fenómeno a partir de datos oficiales de la Secretaría de Educación nacional, y revela fuertes contrastes entre provincias, carreras con exceso de egresados, otras con vacantes que no se cubren, y un mapa federal poco articulado.

Actualmente, Argentina cuenta con 1.492 institutos de formación docente, 34 más que en 2015, pero sólo diez provincias sumaron instituciones. El crecimiento fue marcado en San Luis, Chaco y Tucumán, aunque la oferta está mayoritariamente concentrada en institutos estatales, que reúnen el 64% de las instituciones y el 81% de la matrícula. Pese a que el número de estudiantes se redujo un 5% en todo el país, la cantidad de egresados se disparó, con picos del 347% en Buenos Aires y del 310% en Catamarca. En paralelo, otras provincias, como Tucumán y Tierra del Fuego, vieron caer la cantidad de titulados.
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El problema no es la cantidad, sino la falta de coherencia entre oferta formativa y necesidades reales del sistema. Así lo afirma Romina de Luca, investigadora del CONICET y coautora del estudio, al señalar que “los resultados refuerzan la necesidad de contar con mayores datos desagregados para evaluar el impacto de las políticas educativas implementadas y planificar la formación docente inicial y continua”. El informe advierte que no hay información pública por cohorte ni por carrera, lo que impide construir diagnósticos certeros sobre vacantes no cubiertas o zonas con exceso de profesionales sin posibilidad de inserción.
La ausencia de planificación estatal queda al desnudo en áreas como Ciencias Exactas, Naturales e Idiomas, donde hay escasez de docentes, mientras que en Ciencias Sociales se repite el fenómeno inverso. Esto genera que materias centrales como Matemática no puedan dictarse con continuidad, algo que Bruno Videla, docente de secundaria, considera “un problema grave, sobre todo si se piensa a Matemática como materia troncal de todas las reformas”.
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Según el informe, ocho provincias lograron aumentar su matrícula docente, con subas del 52% en San Luis y del 50% en Río Negro, mientras otras tuvieron caídas bruscas, como La Pampa (-50%) y Santa Cruz (-40%). Estos contrastes reflejan una desarticulación territorial que no fue abordada ni siquiera con la creación del INFOD. “La formación docente quedó al margen de toda transformación estructural. Proliferan institutos difíciles de justificar según las necesidades educativas reales”, sostiene Emilio Tenti Fanfani, sociólogo y especialista en educación.
Las trayectorias prolongadas, el abandono, la falta de terminalidad y la desconexión entre provincias agravan un panorama en el que la cantidad no garantiza eficacia ni calidad. Romina Busain, profesora de Matemática y Física, lo sintetiza al decir que “el sistema sigue siendo ineficiente y territorialmente desarticulado. Contar con datos públicos sería un paso indispensable para planificar con equidad”. En la misma línea, Martín Salvetti, docente finalista del Global Teacher Prize, advierte que “la formación docente no puede pensarse por fuera de las necesidades reales del sistema. Hace falta financiamiento sostenido, planificación federal y articulación entre Nación y provincias”.
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La paradoja es evidente: hay más docentes recibidos, pero no se cubren los puestos más necesarios, y cada provincia sigue su propio rumbo. Para revertir este escenario, el informe concluye que “el Estado debe garantizar una formación de calidad alineada a un proyecto nacional, con foco en las condiciones institucionales y los datos que permitan planificar con sentido”. El problema no es la cantidad, sino la desconexión entre las aulas de formación y las aulas escolares.









