

El consumo masivo mostró señales de recuperación en julio de 2025, con un aumento del 3,4% frente a junio según datos de la consultora Focus Market, elaborados a partir de información de Scanntech en 756 puntos de venta de todo el país. Sin embargo, la comparación con igual mes del año pasado refleja una baja del 4,3%, lo que evidencia que la mejora mensual no alcanza para revertir la caída interanual.


El relevamiento también registró un incremento del 2,1% en la cantidad de tickets emitidos y una suba del 0,6% en las unidades por ticket. El comportamiento fue más dinámico en el interior del país, donde el consumo subió 9,3% y la facturación creció 10,1% respecto de junio, mientras que en el Área Metropolitana de Buenos Aires el alza fue del 6,6% en consumo y del 6,4% en facturación.
Para el director de Focus Market, Damián Di Pace, la mejora está vinculada a un cambio de escenario. "En un contexto de desaceleración inflacionaria y mayor previsibilidad en los precios, el patrón de compra se está normalizando", afirmó. Según el analista, los hogares dejaron de acopiar mercadería y ahora reponen con mayor frecuencia y en volúmenes más ajustados a sus necesidades.
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El desempeño por formato de tienda mostró diferencias marcadas. El segmento Self-Independiente tuvo un crecimiento del 15,1% en el consumo con un ticket promedio de $10.811. El autoservicio grande subió 17,6% ($9.845 de ticket promedio), el mediano creció 21,3% ($7.566) y el chico lideró con un avance del 21,4% y un ticket de $6.795.
Di Pace remarcó que "la estabilidad relativa de precios, aunque sean altos, reduce el incentivo al adelantamiento de compras", lo que permite a las familias destinar parte del ingreso a otros rubros, especialmente servicios. A su criterio, el reto para las empresas será adaptarse a una demanda más estable pero con menor volumen por operación.
En el análisis por categorías, los alimentos aumentaron su peso en la facturación de 63,6% a 64% y las bebidas de 20,6% a 20,8%, mientras que cuidado personal retrocedió de 8,4% a 8,1% y limpieza de 7,4% a 7,2%. Medido en unidades, limpieza subió de 5,5% a 6%, cuidado personal de 1,9% a 2% y alimentos de 46,8% a 48,2%, mientras que las bebidas cayeron de 45,8% a 43,8%.
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El estudio también destaca que el patrón de compra actual es muy distinto al de 2024. "El año pasado, la inercia inflacionaria y la incertidumbre llevaban a adelantar compras y acumular productos no perecederos como resguardo", recordó Di Pace. En cambio, este año, incluso con el movimiento del dólar en julio, esa conducta no se repitió.
La demanda, concluye el informe, exige a los comercios —mayoristas y minoristas— adaptar estrategias hacia una mayor rotación de productos y dejar en segundo plano el stockeo masivo que caracterizó a otros períodos.
Fuente: Infobae.

















