La CGT en estado de shock electoral: el triunfo libertario reconfigura el poder sindical

Política27/10/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
CGT
CGT

El aplastante triunfo libertario encabezado por Javier Milei dejó en estado de desconcierto a la CGT, que esperaba un resultado más favorable para Fuerza Patria y un escenario que le permitiera proyectar una nueva conducción alineada con el regreso del peronismo en 2027. El golpe político fue tan fuerte que los principales referentes de la central sindical ya preparan una reunión ampliada de la mesa chica para esta semana, con el objetivo de redefinir la estrategia y evitar una fractura interna antes del congreso previsto para el 5 de noviembre.

El nuevo mapa sindical muestra un reacomodamiento de fuerzas. El sector dialoguista, liderado por Gerardo Martínez (UOCRA), salió fortalecido al consolidar su postura de mantener canales abiertos con el Gobierno y buscar acuerdos que frenen los proyectos más duros de reforma laboral. En cambio, el ala más combativa, representada por Héctor Daer (Sanidad), Abel Furlán (UOM) y Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), perdió terreno político tras apostar a una derrota libertaria que nunca llegó.


OTRAS NOTICIAS: 

Diego Torres conomíaEl nuevo escenario económico luego de las elecciones necesita reconstruir la confianza


Desde el domingo a la noche, los principales dirigentes del sindicalismo intentan procesar el impacto de las urnas, conscientes de que el resultado electoral tendrá consecuencias directas en la composición de la nueva cúpula cegetista. “Estamos con las preocupaciones lógicas de hacia dónde vamos”, admitió el referente de un gremio de servicios, en alusión a la necesidad de que la nueva conducción tenga dirigentes con capacidad de gestión y respaldo interno para afrontar una etapa que anticipa conflictos.

La autocrítica hacia el peronismo también apareció con fuerza entre los gremialistas. Algunos dirigentes responsabilizaron a Cristina Kirchner y Axel Kicillof por una campaña desarticulada y carente de propuestas concretas. “Creyeron que se podía ganar sólo atacando a Milei y sin mostrarle a la gente un proyecto alternativo”, se lamentó un referente sindical, quien incluso pidió la renuncia de la expresidenta a la conducción del PJ.


OTRAS NOTICIAS: 

Senador Edgardo KueiderReapareció Edgardo Kueider y denunció causas “inventadas” por haber impulsado la Boleta Única


El mayor temor que hoy circula en los pasillos de Azopardo es el avance de una reforma laboral sin consenso. El Consejo de Mayo, espacio multisectorial de diálogo en el que participa Martínez, había servido hasta ahora como canal de negociación técnica entre el Gobierno, los empresarios y la CGT. Sin embargo, los anuncios recientes del ministro Luis Caputo y del secretario de Trabajo Julio Cordero, que reflotaron la idea de implementar “salarios dinámicos” y cambios en las indemnizaciones, reavivaron las tensiones dentro del movimiento obrero.

Para muchos dirigentes, el nuevo equilibrio de poder en el Congreso, con un bloque libertario fortalecido, podría dar impulso a un viejo proyecto de “Democracia Sindical” impulsado por sectores del PRO y la UCR, ahora con apoyo de La Libertad Avanza. Esa iniciativa propone limitar la reelección indefinida de los dirigentes gremiales, eliminar la cuota solidaria, garantizar representación de minorías en los sindicatos y transparentar el manejo de las obras sociales. La sola posibilidad de que vuelva a discutirse en el recinto genera pánico entre los gremialistas.


OTRAS NOTICIAS: 

Pablo QuirnoPablo Quirno jurará este martes como nuevo canciller en reemplazo de Gerardo Werthein


En contraste, Martínez y otros dirigentes de perfil negociador como Hugo Moyano (Camioneros) y Sergio Romero (UDA) insisten en que la CGT debe sostener una estrategia de diálogo firme pero racional, evitando caer en la confrontación directa. “No veo nada apocalíptico. Debe primar la sensatez y una transición justa en los cambios”, expresó el titular de la UOCRA, al remarcar que la modernización laboral “debe garantizar derechos tanto a trabajadores como a empleadores”.

La CGT, golpeada por la derrota de sus aliados políticos, enfrenta así una crisis de identidad y liderazgo. En los próximos días, la mesa chica ampliada debatirá cómo reestructurar la organización para evitar rupturas internas y definir una nueva línea de acción frente al Gobierno. Algunos impulsan un sindicalismo más combativo; otros, una actitud pragmática que preserve poder de negociación.

Fuente: N A

Te puede interesar

Suscribite al newsletter de #LA17