La Corte Suprema confirmó la condena a Julio De Vido por la tragedia de Once
Actualidad11/11/2025
REDACCIÓN
Ex ministro Julio de Vido
La Corte Suprema de Justicia dejó firme la condena a Julio De Vido por la tragedia de Once. El exministro de Planificación Federal recibió una pena de cuatro años de prisión por administración fraudulenta en perjuicio del Estado, tras un extenso proceso judicial que se inició hace más de trece años.
El fallo, firmado por Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, rechazó los recursos de la defensa y del Ministerio Público Fiscal. Los jueces consideraron “inadmisibles” las apelaciones y aplicaron el artículo 280 del Código Procesal Civil y Comercial, con lo que cerraron la instancia judicial.
De esta forma, la Corte ratificó la decisión del Tribunal Oral Federal N°4, que en 2018 había responsabilizado a De Vido por no controlar el uso de fondos públicos asignados a Trenes de Buenos Aires (TBA). La concesionaria fue señalada por el deterioro del servicio ferroviario que desembocó en el siniestro ocurrido el 22 de febrero de 2012, donde murieron 51 personas y más de 700 resultaron heridas.
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El tribunal entendió que el exfuncionario incumplió su obligación de fiscalizar el destino de los subsidios millonarios que recibía la empresa. Aunque fue absuelto por el delito de estrago culposo —vinculado directamente con las muertes—, se lo encontró responsable de administración fraudulenta, al permitir que los fondos públicos fueran usados sin control ni rendición.
En su momento, los jueces Pablo Bertuzzi, Néstor Costabel y Gabriela López Iñíguez sostuvieron que el Ministerio de Planificación “ignoró informes que alertaban sobre el mal estado de los trenes y el riesgo para los pasajeros”. Esa falta de acción, remarcaron, contribuyó a sostener un sistema que terminó en tragedia.
La Cámara Federal de Casación Penal confirmó la condena y la defensa apeló ante la Corte. En 2024, el máximo tribunal ratificó la responsabilidad penal de De Vido pero pidió revisar la pena. Tras esa revisión, el monto se fijó definitivamente en cuatro años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
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El fallo también incluyó las accesorias legales y las costas del proceso. Con esta decisión, la Corte cerró el último intento de la defensa, que buscaba la prescripción de la causa. El expediente, que tuvo una duración de más de una década, queda así concluido en el plano penal.
El caso Once marcó uno de los momentos más dolorosos del transporte argentino reciente. La tragedia expuso el colapso del sistema ferroviario y la falta de control estatal sobre los concesionarios privados. Las víctimas y familiares reclamaron durante años una condena firme a los responsables políticos.
“Después de tanto tiempo, se hizo justicia”, dijeron desde la agrupación que nuclea a familiares de las víctimas. Para ellos, el cierre judicial representa una reparación simbólica después de años de audiencias, apelaciones y dilaciones que mantuvieron abierta una herida que aún no cicatriza.
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