PAMI anunció medidas más estrictas tras detectar maniobras fraudulentas en órdenes y facturaciones

La conducción del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados informó que intensificó los controles sobre prestadores al confirmar irregularidades graves en el sistema electrónico de órdenes médicas, donde aparecieron consultas simuladas, recetas emitidas sin sustento y maniobras que utilizaban datos personales de afiliados sin autorización. El organismo sostuvo que estas prácticas afectan la transparencia y el uso correcto de los recursos destinados a la atención sanitaria.

En un comunicado oficial, el Instituto afirmó que “esta gestión asumió el compromiso de terminar con los intentos de fraude sistemático, la simulación de consultas, la falsificación documental, el uso indebido y la vulneración del sistema de trazabilidad”, y subrayó que las auditorías internas detectaron un uso desmedido de prestaciones por parte de distintos profesionales. También aseguró que se realizaron presentaciones ante el Ministerio Público Fiscal para avanzar con denuncias penales en cada caso.

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El organismo explicó que estas conductas “podrían configurar ilícitos, dando lugar a posibles actos de defraudación contra la administración pública y afectando negativamente la correcta gestión de los recursos públicos”, lo que motivó una actualización profunda del sistema de supervisión. La nueva estructura incorpora monitoreos de umbrales prestacionales, control estricto del turnero institucional y verificaciones permanentes en función de la capacidad declarada por cada especialidad.

Desde PAMI señalaron que “estas acciones buscan generar un mayor control y racionalización del gasto basadas en la actualización de las capacidades prestacionales de los prestadores y a nuevas pautas para la aplicación de umbrales de valorización diferencial”, y remarcaron que cualquier desvío será sancionado según su gravedad. Aclararon además que la atención a las personas afiliadas se mantiene garantizada de forma continua.

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Fuentes consultadas por Noticias Argentinas indicaron que el organismo “detectó y denunció una serie de maniobras irregulares en el sistema de órdenes médicas electrónicas, que van desde la simulación de consultas y facturación sin respaldo hasta la falsificación documental y el uso indebido de datos personales de afiliados”, lo que encendió alertas en distintas áreas técnicas y jurídicas.

Las mismas fuentes describieron que “se trata de casos graves en los que prestadores médicos, clínicas y farmacias aprovecharon los mecanismos del sistema electrónico para cobrar prestaciones que nunca se realizaron, emitir recetas falsas o manipular identidades de afiliados”, prácticas que derivaron en actuaciones judiciales de alcance nacional. El Instituto confirmó que existen al menos seis causas activas impulsadas por la UFI PAMI ante la Justicia Federal.

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Entre los casos mencionados se encuentran prestadores que generaban órdenes inexistentes, empresas que continuaron maniobras fraudulentas pese a advertencias formales, profesionales que emitían órdenes irregulares desde sus usuarios y farmacias que dispensaban recetas falsas a terceros. Las auditorías también detectaron centros donde se verificó manipulación documental y uso compartido de credenciales profesionales.

El organismo sostuvo que “en todos los casos se comprobó un patrón de falsificación y abuso del sistema OME (Órdenes Médicas Electrónicas), que derivó en la presentación de denuncias penales por estafa, falsificación de documentos y defraudación contra la administración pública”, y señaló que los procedimientos continúan para identificar responsabilidades adicionales.

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Desde la conducción remarcaron que “el objetivo es proteger los recursos de los jubilados y garantizar que cada peso se use en prestaciones reales y de calidad, no en maniobras que distorsionan el sistema”, al tiempo que confirmaron que las nuevas medidas ya se encuentran operativas y contemplan sanciones administrativas y penales según el nivel de desvío detectado.