Revocaron 11 libertades condicionales en dos meses: la Fiscalía pidió que vuelvan a prisión
Actualidad03/12/2025
Sergio Bustos
Mauricio Baigorria.
El Ministerio Público Fiscal puso el foco en lo que ocurre después de la condena, cuando la sentencia ya quedó firme y empieza el tramo más sensible: que la pena se cumpla. En ese terreno, el área de Ejecución de Pena informó que en los últimos dos meses logró la revocación de 11 libertades condicionales y consiguió que esas personas vuelvan a prisión para seguir cumpliendo la condena.
El responsable del área en Fiscalía, Mauricio Baigorria, explicó el objetivo del trabajo cotidiano y marcó una línea directa con la seguridad jurídica del sistema. “El Ministerio Público Fiscal, a través del área de Ejecución de Pena, trabaja diariamente para garantizar que las condenas dictadas por los tribunales se cumplan conforme a la ley y que los beneficios como la libertad condicional se apliquen de forma responsable y efectiva”, sostuvo.
Baigorria también remarcó que el control no se agota en el dictado de una condena. “Este control permanente es clave para asegurar el cumplimiento real de las sanciones penales”, agregó, al describir una tarea que combina supervisión, seguimiento de pautas y pedidos de intervención judicial cuando aparecen señales de incumplimiento.
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Según el área de prensa del MPF, la ejecución penal empieza cuando la persona ya quedó condenada. Desde ese momento, el área de Ejecución supervisa el cumplimiento de la pena y, si el condenado accede a salidas transitorias o libertad condicional, controla que respete reglas concretas: fijar domicilio, presentarse de manera periódica y realizar tratamientos, entre otras obligaciones.
El equipo fiscal actúa cuando detecta faltas o situaciones nuevas que alteran las condiciones del beneficio. En este punto, Baigorria detalló el resultado del trabajo reciente: “En este marco de control, en los últimos dos meses el área de Ejecución logró que se revocaran 11 libertades condicionales”, indicó.
Y precisó el fundamento de esos casos: “En todos esos casos, la Fiscalía demostró incumplimientos o nuevos hechos que motivaron que el Juez de Ejecución ordenaran que las personas beneficiadas volvieran a prisión para continuar cumpliendo la condena de manera efectiva”, afirmó.
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La libertad condicional funciona como un beneficio previsto por ley, pero no como un cierre automático del castigo. Puede otorgarse cuando el condenado cumplió tres cuartas partes de la pena y muestra buena conducta. Si rompe las reglas impuestas o comete un nuevo delito, el sistema habilita una respuesta rápida.
La Ley 24.660 permite pedir la revocación cuando aparece un incumplimiento o una conducta delictiva nueva. En ese esquema, el MPF apunta a una intervención temprana para sostener lo que resolvió la Justicia y evitar que las condiciones del beneficio queden en letra muerta.
Con esas 11 revocaciones, la Fiscalía busca un mensaje hacia adentro del sistema penal: la pena no termina en el papel. Si hay libertad condicional, hay control. Y si ese control detecta incumplimientos, la respuesta es concreta: vuelta a prisión para cumplir de manera efectiva la condena.
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