Una fuga de agua en el Louvre afectó a más de 300 libros y activó un proceso de restauración

Actualidad08/12/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
Museo del Louvre. Foto RTVE
Museo del Louvre. Foto RTVE

La dirección del Museo del Louvre confirmó que una fuga de agua registrada a fines de noviembre dañó varios cientos de libros pertenecientes a la biblioteca de egiptología, un espacio consultado con frecuencia por investigadores y especialistas. El incidente ocurrió el 26 de noviembre y generó un movimiento inmediato dentro del área para resguardar material de consulta habitual, según informaron medios franceses que accedieron a los reportes internos. La comunicación oficial sumó precisiones sobre el estado de los ejemplares y el procedimiento de recuperación que se inició tras detectar la filtración.

El subdirector del museo, Francis Steinbock, detalló a la prensa local que el daño alcanzó entre 300 y 400 volúmenes, un conjunto que incluye revistas especializadas y documentación científica utilizada por equipos que trabajan sobre diferentes períodos de la historia egipcia. Steinbock explicó que se trata de material que forma parte del uso cotidiano de la biblioteca y que mantiene un flujo constante de consultas. El episodio puso en foco la importancia de estos recursos para la investigación académica y para la actividad interna del museo.


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El funcionario aclaró que la filtración no afectó piezas del patrimonio ni objetos exhibidos en las salas, un dato que aportó tranquilidad frente a las primeras versiones que circularon en redes y medios europeos. En diálogo con periodistas, remarcó que “no fueron identificadas ‘pérdidas irreversibles o permanentes’”, una frase que permitió entender el alcance del daño y la posibilidad concreta de recuperar los ejemplares. También señaló que, si bien los libros dañados son “extremadamente útiles y consultados con frecuencia, no son únicos en el mundo”, lo que reduce el impacto patrimonial del hecho.

El Louvre informó que los equipos ya trabajan en el secado de los volúmenes afectados, un proceso que requiere control de temperatura, ventilación y observación constante para evitar deformaciones y otros deterioros habituales tras el contacto prolongado con el agua. Según la institución, una vez que cada ejemplar alcance condiciones estables, será enviado a un encuadernador para su restauración. La previsión es que vuelvan a las estanterías una vez finalizada la intervención técnica, lo que permitirá restituir la dinámica habitual de la biblioteca.


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La comunicación oficial subrayó que la recuperación de estos libros forma parte de un procedimiento que el museo activa cada vez que se identifica una situación que compromete su documentación científica. La biblioteca de egiptología es una de las áreas de consulta más utilizadas por investigadores externos y personal de la institución, lo que le otorga un valor especial dentro del funcionamiento cotidiano del Louvre. El incidente recordó la necesidad de mantener controles permanentes en sectores sujetos a humedad o variaciones de temperatura, especialmente en edificios históricos.

El episodio se conoció este domingo a través de medios franceses que accedieron a las declaraciones de Steinbock y a documentos vinculados a la evaluación inicial del daño. La información reproducida por Xinhua y la agencia Noticias Argentinas aportó otra capa de contexto sobre la gestión de la institución frente a incidentes de infraestructura. La preocupación inicial se atenuó a partir de los datos oficiales, que descartan impacto en piezas patrimoniales y sostienen la posibilidad de una restauración completa de los materiales afectados.


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La magnitud del agua filtrada, que alcanzó una parte del depósito contiguo a la biblioteca, obligó a revisar la rutina del personal técnico que intervino con secadores, paños y dispositivos preparados para este tipo de emergencias. Los reportes indican que el flujo se controló en pocas horas y que se logró resguardar la mayor parte de la documentación almacenada en los estantes superiores. El análisis final determinará si algún ejemplar requiere un tratamiento más profundo para recuperar su estado original.

Fuente: NA.

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