En 2025 se vendieron más 0km brasileños que nacionales y cambió el mapa del mercado automotor

El mercado automotor de 2025 muestra un giro marcado en la composición de lo que se vende en concesionarias. Con un esquema económico que promueve mayor apertura, los autos importados ganan participación y pasan a ocupar el lugar que hasta hace poco dominaban los 0km fabricados en el país. La consecuencia se ve en un dato que ordena toda la discusión: se venden más vehículos brasileños que nacionales.

El cambio contrasta con lo que ocurría hasta 2023, cuando el promedio del mercado rondaba un 70% de 0km nacionales. En el escenario actual, la relación se invierte y los vehículos que llegan del exterior ya representan cerca del 60% de las ventas. El fenómeno se siente en modelos, disponibilidad y precios relativos, con terminales que ajustan su oferta para un público que busca opciones inmediatas.

En ese proceso, el foco público suele posarse sobre las marcas chinas por su presencia creciente. Sin embargo, el grueso de la importación todavía llega desde el socio central de la Argentina en la industria automotriz regional: Brasil. El texto de base lo pone en cifras: del total de importaciones del sector, el 74,8% proviene del país vecino, muy por encima del resto de los orígenes.

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China aparece como segundo proveedor, pero aún lejos en volumen. En 2025 concentra 10% de los ingresos de 0km importados y desplaza al tercer lugar a México. El cuadro general deja una lectura clara: la irrupción china se nota en la calle, pero el motor principal de la importación sigue en el Mercosur.

Los números de ACARA terminan de confirmar el cambio. El 49% de los autos vendidos en 2025 son de origen brasileño y solo el 40% sale de fábricas locales. El resto se reparte entre una decena de países, con participaciones menores que completan el menú del mercado.

La foto del año pasado deja más visible el vuelco. En 2024, los 0km que llegaban de Brasil representaban 36%, mientras que los producidos en la Argentina alcanzaban 56% de las ventas. En apenas un año, la participación local pierde la mayoría y Brasil pasa a ser el origen dominante del patentamiento.

El crecimiento total de patentamientos también aparece como un dato fuerte, pero no implica una mejora equivalente para la industria local. El texto sostiene que los patentamientos suben 48% interanual, aunque la expansión se apoya sobre el ingreso de importados. En otras palabras, el mercado crece, pero el empuje se concentra fuera del país.

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El detalle de unidades ayuda a dimensionar el movimiento. Entre enero y noviembre de 2024 se patentan 392.450 vehículos y, con 56% “made in Argentina”, el volumen nacional asciende a 219.772 unidades, mientras Brasil aporta 141.282. En ese momento, el orden todavía favorece a los modelos argentinos en el mercado local.

En los primeros once meses de 2025, el total trepa a 587.000 unidades, pero el reparto cambia de lado. Con 40% nacionales, la producción local suma 234.800 vehículos, apenas unos 15.000 más que en 2024, lo que equivale a una suba de 6,8%. En paralelo, los brasileños se quedan con 49%, que representa 287.630 unidades, unas 146.000 más que el año anterior y con un crecimiento que supera el 100% según el propio texto.

Otra pieza del rompecabezas aparece en quién importa esos autos. El informe sostiene que el 90% de las importaciones de autos las realizan las propias terminales agrupadas en ADEFA, mientras que el 10% queda en manos de CIDOA, la cámara de distribuidores de marcas no radicadas en el país. El esquema muestra una particularidad: las mismas empresas que fabrican localmente también traen una parte grande de los modelos que venden, sobre todo desde Brasil, para completar su gama.

Con ese escenario, la proyección para 2026 apunta a más movimiento importador desde el país vecino, impulsado por un mercado que se espera más grande que el de 2025. La discusión de fondo queda planteada en términos de participación industrial, oferta regional y peso relativo de la producción argentina en su propio mercado. Y el dato del año deja una síntesis que no pasa inadvertida: Brasil se queda con la mayor porción del crecimiento.