

ALARMA POR METALES TÓXICOS EN SUPLEMENTOS DE PROTEÍNA
Los productos de origen vegetal y orgánico son los más afectados. La industria sufre cuestionamientos por los estándares de seguridad de los artículos.
Actualidad10/01/2025

Un informe de Clean Label Project reveló que casi el 50% de los suplementos superan los límites establecidos por la Proposición 65 de California. Los productos saborizados con chocolate presentaron las concentraciones más altas. El análisis incluyó 160 productos de 70 marcas populares.
El plomo y el cadmio son metales altamente tóxicos para la salud. El plomo puede causar problemas neurológicos y afectar el desarrollo infantil. Por su parte, el cadmio está vinculado a enfermedades cardiovasculares y respiratorias.
OTRAS NOTICIAS:
Los suplementos a base de soya, arroz y guisantes concentran mayores niveles de contaminantes. Estos cultivos absorben metales del suelo, especialmente en terrenos contaminados. Los productos orgánicos mostraron hasta tres veces más plomo que los no orgánicos.
El cacao utilizado en los productos saborizados con chocolate contribuye a la contaminación. El 43% de los chocolates analizados excedieron los límites de plomo en un estudio previo. Este ingrediente absorbe metales pesados con facilidad.
OTRAS NOTICIAS:
Los suplementos a base de suero de leche y colágeno presentaron menores niveles de contaminación. Solo el 28% de estos productos superó los límites permitidos. Representan opciones más seguras dentro del mercado.
La presencia de bisfenoles en los productos analizados disminuyó significativamente. Solo tres de los 160 suplementos contenían estos químicos disruptores hormonales. Este avance refleja una mejora en las prácticas de la industria.
OTRAS NOTICIAS:
La industria de suplementos sufre críticas por la falta de regulación estricta. La Council for Responsible Nutrition cuestionó los métodos del informe. Clean Label Project defendió la transparencia y los estándares aplicados.
El informe resalta la necesidad de mayor supervisión en la industria alimentaria. Los productos promocionados como saludables deben cumplir estándares más altos. La seguridad del consumidor debe ser la prioridad.







