
La confianza en el Gobierno registra su peor caída desde la llegada de Milei
Política26/08/2025
REDACCIÓN
El Índice de Confianza en el Gobierno (ICG) elaborado por la Universidad Torcuato Di Tella confirmó una baja significativa en la percepción ciudadana sobre la gestión de Javier Milei. El indicador cayó un 13,6% en agosto y marcó el peor registro desde la asunción presidencial.


La caída del índice refleja un malestar extendido en varios frentes. El informe señala retrocesos en cinco dimensiones: evaluación general del Gobierno, percepción de honestidad de los funcionarios, capacidad de resolver problemas, eficiencia en la gestión y lucha contra la corrupción.
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La economía aparece como un factor central en este escenario. Aunque la inflación se desaceleró en las últimas semanas, el poder adquisitivo de los hogares sigue en retroceso y crece la cantidad de personas que no logran cubrir sus gastos básicos.
El informe subraya que no se trata de un dato aislado, sino de una tendencia sostenida. Desde comienzos de 2024, la confianza venía mostrando señales de deterioro, pero el dato de agosto consolidó la curva descendente.
En el plano político, este retroceso impacta en la capacidad del oficialismo de llevar adelante su agenda. La pérdida de apoyo en sectores que inicialmente respaldaron el cambio de rumbo genera dudas sobre la gobernabilidad y el margen de maniobra legislativo.
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La expectativa de un cambio radical en diciembre de 2023, que otorgó al Gobierno un capital inicial de confianza, contrasta con la realidad actual. Los argentinos no perciben mejoras concretas en su vida cotidiana y eso erosiona la paciencia social.
Los especialistas consideran que este tipo de índices funcionan como un termómetro del humor social. El descontento generalizado no sólo mide gestión económica, sino también la forma en que la ciudadanía interpreta la capacidad de la dirigencia para dar respuestas.
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El informe llega en un contexto político marcado por la campaña electoral y por denuncias que involucran a funcionarios de alto rango. Con este escenario, el Gobierno enfrenta un cuadro complejo en el que las demandas económicas y sociales se mezclan con la disputa política.
Fuente: Universidad Torcuato Di Tella

















