

El Gobierno del Chubut, a través del Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas, llevó adelante un encuentro de trabajo con representantes de los municipios cordilleranos con el propósito de dar un paso firme en la organización del turismo de montaña. La reunión tuvo como objetivo avanzar en el ordenamiento del senderismo en la región y generar un marco de regularización para una actividad que creció en los últimos años, atrayendo tanto a visitantes locales como a turistas internacionales que recorren los circuitos de la cordillera.


La mesa de trabajo fue encabezada por representantes de la cartera turística provincial que conduce el ministro Diego Lapenna, y contó con la participación de autoridades de Cholila, Lago Puelo, Esquel, El Hoyo y Trevelin. En paralelo, se sumaron referentes de la Secretaría de Bosques de la Provincia, lo que permitió incorporar una mirada técnica vinculada a la conservación de áreas naturales sensibles que suelen ser parte de los recorridos más visitados.
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Además de las autoridades provinciales y municipales, el encuentro reunió a una amplia representación del sector turístico. Estuvieron presentes representantes del Parque Nacional Los Alerces, integrantes del Club Andino Cholila y del Club Andino Lago Puelo, guías profesionales nucleados en la Asociación de Guías de Montaña y diversos prestadores privados que forman parte de la cadena de servicios vinculada al senderismo. Esta diversidad de actores permitió generar un debate plural sobre las necesidades y perspectivas del sector.
Durante la jornada se realizó un relevamiento sobre el estado de los principales senderos de la región, con foco en la Huella Andina y en los caminos conexos que la complementan. El diagnóstico incluyó un repaso por los tramos que requieren mejoras en señalización, accesibilidad y mantenimiento, lo que resulta fundamental para garantizar seguridad a los visitantes y evitar impactos negativos en el entorno natural.
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El análisis técnico permitió identificar las zonas donde los circuitos presentan mayor deterioro y donde la afluencia de turistas genera una presión creciente sobre el ambiente. Las conclusiones coincidieron en la necesidad de invertir en infraestructura básica y de diseñar protocolos claros que definan responsabilidades de control y asistencia en los distintos niveles de gobierno y entre los actores privados que trabajan en la actividad.
Uno de los puntos más debatidos fue la necesidad de contar con una reglamentación específica que ordene la práctica del senderismo en la cordillera. Los participantes coincidieron en que resulta indispensable establecer normas claras que permitan compatibilizar la promoción turística con la preservación ambiental y con la seguridad de quienes transitan los circuitos, especialmente en aquellos tramos que implican mayores exigencias físicas o riesgos asociados a la montaña.
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El encuentro permitió, además, fortalecer la articulación institucional entre los distintos niveles del Estado y los actores privados. La idea que se compartió entre los asistentes fue que el senderismo de montaña debe consolidarse como una actividad organizada y segura, en la que cada sector tenga una participación clara y coordinada, contribuyendo al mismo tiempo a diversificar la oferta turística de la provincia y a potenciar la economía de las localidades cordilleranas.


















