El Gobierno detectó fallas en miles de pasaportes argentinos y pidió devolverlos
Actualidad06/09/2025
REDACCIÓN
Pasaporte argentino
El Gobierno nacional confirmó la existencia de fallas en la fabricación de miles de pasaportes argentinos, lo que compromete su seguridad y obliga a revisar las libretas emitidas dentro de una serie específica. El problema se detectó a partir de reportes en controles migratorios internacionales, donde equipos de lectura alertaron sobre anomalías invisibles al ojo humano. La falla está vinculada con una tinta negra de seguridad suministrada por un proveedor alemán que abastece a las máquinas oficiales desde hace más de una década.
Según fuentes oficiales, entre 5.000 y 6.000 documentos estarían afectados, aunque un mail enviado por el Consulado argentino en San Pablo elevó la cifra potencial a más de 200.000 pasaportes, al incluir a todas las libretas de la serie AAL con numeraciones entre AAL314778 y AAL346228; AAL400000 y AAL607599; y AAL616000 y AAL620088. Si bien el RENAPER aclaró que no todos los documentos de esos lotes presentan fallas, pidió a los ciudadanos alcanzados que devuelvan sus pasaportes para ser verificados.
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El procedimiento prevé que cada documento sea revisado por el Registro Nacional de las Personas. En caso de que la libreta esté correcta, será devuelta al titular, y si presenta imperfecciones será destruida y reemplazada por una nueva versión sin costo adicional. El RENAPER también informó que, ante situaciones urgentes de viaje, se emitirá un pasaporte de emergencia para que los afectados no queden indocumentados.
La Cancillería argentina transmitió la instrucción a todos los consulados en el exterior para que recojan los documentos sospechados. Desde Brasil, el periodista Bruno Bimbi relató que fue notificado por correo electrónico y que se le pidió no usar su pasaporte argentino, ya que podía ser rechazado en fronteras. “Por suerte tenía el pasaporte español, pero imaginate si no lo tuviera. Mucha gente depende solo del argentino y se queda en una situación complicada”, señaló.
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El caso generó un pedido de informes en la Cámara de Diputados por parte de Esteban Paulón y Mónica Fein, legisladores del Partido Socialista. Ambos reclamaron explicaciones al Ejecutivo sobre los riesgos para los ciudadanos en el extranjero, el plazo de reposición de los documentos y las medidas que se adoptarán para evitar nuevas fallas. También cuestionaron la contratación del proveedor europeo, al que responsabilizan de no garantizar los estándares necesarios para un documento sensible.
Desde la Casa Rosada aclararon que la situación está bajo control desde hace varias semanas, que la producción se normalizó y que las partidas defectuosas fueron retiradas de circulación. “El RENAPER, en coordinación con Migraciones y Cancillería, trabajó para que, en caso de detectarse alguna anomalía, se pueda advertir que se trata de un pasaporte legal emitido en Argentina y se notifique su reposición”, señalaron fuentes oficiales.
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El Gobierno sostuvo que “nadie se quedó sin pasaporte”, ya que los documentos defectuosos siguen siendo válidos mientras se realiza la reposición. Sin embargo, la falta de certezas sobre los plazos de entrega preocupa a quienes necesitan viajar en lo inmediato. En los consulados, las cajas con pasaportes recolectados se envían cada dos semanas a Buenos Aires, donde se revisan uno por uno antes de autorizar su devolución o reimpresión.
El problema pone en evidencia las dificultades de gestión en un área clave del Estado y reaviva el debate sobre la modernización de los sistemas de documentación. Mientras tanto, miles de argentinos en el país y en el exterior deberán atravesar el engorroso proceso de devolución y espera para recuperar un documento en condiciones, en un contexto donde el precio del pasaporte argentino alcanzó los 15 mil pesos, muy por encima de otros países de la región.
Fuente: N A
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