Llegó la IA a las aulas argentinas con 3.000 estudiantes universitarios que tienen robots docentes
Actualidad09/09/2025
REDACCIÓN
UBA con paredes de IA
Unos 3.000 estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires comenzaron el segundo cuatrimestre con un recurso inesperado: robots docentes diseñados a medida para responder dudas, repasar conceptos y acompañar el estudio en 20 materias diferentes.
El proyecto fue desarrollado por equipos de las secretarías Académica, de Investigación y de Sistemas de la facultad, en conjunto con 300 docentes que aportaron materiales y validaron la información. La idea central, según sus impulsores, es integrar la inteligencia artificial al aprendizaje de manera institucional y controlada, evitando que los alumnos dependan de fuentes externas de calidad incierta.
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El subsecretario académico Andrés Pérez Ruffa explicó que el objetivo no es desplazar a los profesores sino sumar una herramienta de apoyo. “Buscamos orientar el uso de la IA y formar a los docentes para que puedan incorporarla en el aula con criterios claros”, señaló.
Cada chatbot fue entrenado con los contenidos de su cátedra y se integró en la plataforma virtual de Económicas, lo que permite registrar la frecuencia de uso, los temas más consultados y el tiempo de interacción de los estudiantes. “Vimos que cuando faltan tres días para un examen, la curva de consultas crece en forma acelerada”, contó Pérez Ruffa al describir uno de los patrones detectados.
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El entrenamiento incluyó varias etapas: pruebas pedagógicas para evaluar claridad y tono, pruebas conceptuales para corregir errores comunes, pruebas factuales que garantizaron coherencia con los materiales subidos y un test de robustez para observar cómo respondían ante preguntas fuera del temario. De esa manera se buscó asegurar que el robot se mantuviera dentro de los límites de cada materia.
La llegada de los chatbots generó distintas reacciones entre los docentes. Algunos valoraron la posibilidad de aprovecharlos como guía práctica, mientras que otros expresaron temores sobre un eventual reemplazo del trabajo humano. Pérez Ruffa fue tajante: “Como cualquier tecnología, esto es un soporte. El docente sigue siendo irremplazable”.
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El próximo paso será evaluar resultados no solo en términos académicos sino también en la motivación de los estudiantes. Existen antecedentes alentadores: un experimento realizado en Harvard mostró que quienes usaron un chatbot en Física aprendieron más del doble en menos tiempo que sus compañeros que no lo utilizaron, además de mostrar mayor compromiso con la cursada.
En Económicas, el plan inicial incluyó materias de Administración, Contabilidad, Derecho, Economía, Humanidades, Matemática, Sistemas y Tributación. La idea es extender el recurso a otras áreas y consolidar un marco institucional que asegure formación docente, criterios éticos y una mirada crítica sobre los sesgos de la inteligencia artificial.
Fuente: Diario Clarín
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