La dura decisión del Papa: destitución histórica en la Iglesia por abuso sexual de menores
Actualidad16/09/2025
REDACCIÓN
El Papa León XIV toma una decisión histórica contra el abuso sexual en la Iglesia: destituye a un diácono condenado.
El Papa León XIV acaba de dar un golpe fuerte y directo en su primera sanción relevante contra la pederastia dentro de la Iglesia Católica. Alessandro Frateschi, un diácono italiano de 50 años, ha sido destituido de todas sus funciones clericales tras ser condenado por abuso sexual de menores. La noticia, dada a conocer este martes por la diócesis de Latina, confirma que el pontífice tomó esta decisión después de que Frateschi fuera sentenciado a 12 años de prisión en 2024 por delitos cometidos entre 2018 y 2023.
“El Papa ha decidido destituirlo del clero sin posibilidad de apelación”, se precisó en el comunicado de la diócesis, ubicada en el centro de Italia. La acción resalta la postura inflexible del pontífice contra los abusos sexuales, en línea con la "tolerancia cero" que exigen las asociaciones de víctimas.
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Este hecho marca el primer caso público en el que León XIV toma cartas en el asunto desde su elección en mayo pasado, enviando un mensaje contundente sobre la actitud de la Iglesia frente a estos crímenes.
Frateschi, que también era maestro de catecismo en una escuela secundaria de Latina, fue hallado culpable de abusar de cinco menores, tres de ellos sus propios alumnos. La gravedad de la sentencia no solo afecta su vida personal, sino que le priva de la capacidad de hablar en nombre de la Iglesia, oficiar misas o enseñar teología. En palabras de la diócesis, la pérdida del estado clerical es la sanción más severa que se puede imponer en la Iglesia.
La decisión también se enmarca en un contexto más amplio de reacciones dentro del Vaticano ante los abusos de este tipo. En una emotiva oración realizada en la basílica de San Pedro, el Papa León XIV expresó su solidaridad con las víctimas de la violencia sexual. "La violencia sufrida no puede borrarse", afirmó el pontífice, reiterando su compromiso con la reparación de las injusticias sufridas por los menores.
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Con este acto, el Papa no solo condena el delito, sino que también envía un mensaje claro: la Iglesia tomará medidas drásticas ante quienes se aprovechan de su posición para abusar de la confianza y la vulnerabilidad de los demás.
Este paso refuerza la postura de una Iglesia que, pese a los desafíos internos, busca dar un giro significativo hacia la transparencia y la justicia.
Fuente: SwissInfo
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