Bancos y consultoras anticipan un crecimiento más moderado de la economía argentina en 2026

Las expectativas económicas para el próximo año comenzaron a ajustarse en función de los datos recientes y del comportamiento regional. Un relevamiento de FocusEconomics, basado en aportes de 50 bancos y consultoras nacionales e internacionales, fijó en 3,1% la proyección de crecimiento para 2026, lo que representa una reducción respecto de la estimación previa. El recorte, aunque moderado, refleja un escenario donde predominan la cautela, el impacto de variables externas y la persistencia de desequilibrios que afectan la recuperación.

Según el reporte, FocusEconomics señaló que “nuestros panelistas han revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento del PIB recientemente, aunque sigue siendo sólido según los estándares regionales”. El ajuste se suma al registro de una caída intermensual de 0,1% durante julio, dato que interrumpió el repunte observado a comienzos de año y ubicó la actividad por debajo del máximo registrado en febrero. El informe destacó además que la economía acumuló retracciones en cinco de los primeros siete meses analizados.

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El trabajo incluyó una mirada sobre la región, donde la performance comparada sigue siendo un desafío. El estudio advirtió que América Latina tuvo un crecimiento promedio de apenas 1,4% entre 2014 y 2024, el menor entre todas las zonas evaluadas. Entre los motivos, el documento mencionó la inestabilidad política persistente, los altos niveles de delincuencia y corrupción, la debilidad del sistema educativo, la concentración en materias primas y la escasa presencia en sectores como electrónica y tecnologías de la información.

La proyección hacia adelante tampoco muestra un repunte significativo. El informe aseguró que América Latina seguirá siendo el mercado emergente de menor expansión hasta 2029, con un promedio anual apenas superior al 2%. En paralelo, los analistas prevén que los bancos centrales de la región mantengan recortes de tasas, aunque a un ritmo más lento que en 2023–2025, debido a que los niveles actuales se encuentran más próximos a tramos considerados neutrales.

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El documento también evaluó el impacto potencial sobre las monedas regionales. Los expertos estimaron que tasas más bajas, combinadas con una inflación mayor a la de Estados Unidos y con escenarios políticos inestables, podrían generar una tendencia depreciativa en la mayoría de los países latinoamericanos, lo que afectaría costos internos y capacidad de ahorro.

Otro punto abordado fue la evolución del acuerdo comercial entre Unión Europea y Mercosur. Si el tratado avanza hacia su implementación, se configuraría una zona de libre comercio superior a 700 millones de personas, con efectos directos en sectores exportadores. El informe sostuvo que los productores agrícolas latinoamericanos serían algunos de los principales beneficiarios, debido al mayor acceso al mercado europeo, históricamente protegido.

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Asimismo, la reducción de aranceles sobre bienes industriales podría contribuir a moderar la inflación en los países de la región, mientras que inversiones provenientes de Europa tendrían margen para expandirse en sectores energéticos, logísticos y tecnológicos. Estas dinámicas, según el reporte, marcarán parte del tablero macroeconómico en los próximos años, condicionando las proyecciones específicas de cada país.

Fuente: NA.