Una estatua de Messi fue mutilada en Mar del Plata y desata una furia silenciosa

Actualidad30/11/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
Estatua Messi
Estatua Messi

La figura del capitán apareció con las piernas arrancadas en pleno centro marplatense y volvió a exponer una seguidilla de ataques que no encuentra freno.

La estatua de Lionel Messi amaneció destrozada y encendió una ola de fastidio en Mar del Plata. La imagen, ubicada en Moreno y Santa Fe, quedó sin piernas después de un ataque nocturno que dejó a vecinos y turistas con bronca y preguntas sin respuesta.

El homenaje ya había sufrido golpes severos, incluido un episodio reciente en el que le arrancaron la cabeza. Esta vez, el daño se extendió al torso y reforzó una idea que suena cada vez más fuerte en la ciudad: alguien quiere borrar esa figura del espacio público.

La pieza nació en 2018 por iniciativa de un bar local y volvió a lucir en 2024 tras la conquista en Qatar. Su presencia buscaba celebrar la alegría que generó el título mundial, aunque el vandalismo la transformó en un símbolo de desgaste.

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El ataque apareció en un momento delicado. La tensión entre la AFA y el Gobierno suma críticas, discusiones y murales incendiarios sobre fallos arbitrales y el torneo que consagró a Rosario Central. En ese clima, todo se magnifica.

Algunos miraron a Claudio Tapia y remarcaron que el ruido político y futbolero contaminó el debate. Sin embargo, nada indica que esta agresión se vincule a esa disputa, un detalle que desarma teorías rápidas y deja el foco en la violencia urbana.

Vecinos de la zona comentaron su hartazgo por la escena repetida. Muchos se acercaron para ver el daño y coincidieron en la misma reacción: bronca, sorpresa y un desconcierto que crece cada vez que la estatua aparece dañada.

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Los dueños del bar que impulsó el homenaje se mantuvieron en silencio. La molestia por el estado de la figura y por el trabajo que demandará otra restauración quedó en evidencia, un sentimiento que también late en la comunidad.

Aunque no hay detenidos ni sospechosos firmes, el episodio reactivó la discusión sobre seguridad y cuidado del espacio público. La estatua, más que un homenaje, parece hoy un termómetro del malestar que circula por la ciudad.

En Mar del Plata esperan una respuesta que frene la seguidilla de ataques. Por ahora, la figura mutilada de Messi refleja una postal inquietante y un desgaste que nadie logra detener.

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