"NO ESPERÁBAMOS ENCONTRAR UN ECOSISTEMA TAN HERMOSO"
Un hallazgo antártico cambió los planes científicos tras el colapso de una plataforma de hielo. Hallaron especies marinas que no esperaban hallar.
Actualidad25/03/2025
Sergio Bustos
Sorpresa en la Antártida.
Un equipo internacional encontró vida submarina jamás observada bajo el hielo antártico. Corales, arañas marinas gigantes y especies desconocidas sorprendieron a los investigadores. El descubrimiento ocurrió por azar, pero podría cambiar todo lo que se sabe del océano profundo.
El hallazgo se produjo tras el desprendimiento de un iceberg del tamaño de Chicago. Fue en enero, cuando la plataforma de hielo se fracturó sin aviso en la Antártida.
El grupo se encontraba en la zona por otro motivo. Su investigación era distinta. Pero aprovecharon la apertura del hielo y descendieron a lo desconocido.
La expedición fue del Instituto Oceanográfico Schmidt. Participaron científicas y científicos de distintas partes del mundo. Lideró la Dra. Patricia Esquete, del CESAM de Portugal.
"Aprovechamos la oportunidad y modificamos nuestro plan", afirmó Esquete. El desprendimiento les abrió una ventana única. Decidieron explorar lo que había debajo.
La zona nunca había sido observada. El hielo la mantenía sellada. La grieta natural les dio acceso por primera vez. Lo que vieron los dejó sin palabras.
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"No esperábamos encontrar un ecosistema tan hermoso y próspero", aseguró Esquete. La biodiversidad fue mucho mayor de lo que suponían.
La expedición duró ocho días. Los buques y robots descendieron hasta 1300 metros. Las cámaras registraron imágenes inéditas del fondo marino.
Hallaron grandes corales, esponjas coloridas y peces de hielo. También observaron arañas marinas gigantes y pulpos. Algunas especies podrían ser totalmente nuevas.
"A juzgar por el tamaño de los animales, esas comunidades viven alli desde hace décadas, o incluso cientos de años", explicó Esquete.
El equipo no esperaba un hallazgo tan relevante. Su viaje tenía otro foco. Pero el azar científico les abrió las puertas a un mundo oculto.
La Dra. Jyotika Virmani, directora del Instituto Schmidt, celebró el momento. "Fue una oportunidad científica excepcional", dijo.
"Los momentos fortuitos forman parte de la emocion de investigar el mar", agregó. Lo inesperado es parte de la esencia de la ciencia.
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Los investigadores creen que muchas especies son nuevas. La comparación con registros previos no arroja coincidencias. El hallazgo ya está bajo análisis en varios laboratorios.
El ecosistema quedó protegido bajo el hielo durante siglos. Eso permitió su conservación. Nunca recibió luz solar ni contacto humano.
El colapso del hielo no fue provocado por la expedición. Se trató de un evento natural, sin intervención.
La fractura abrió un camino directo al fondo. Las condiciones climáticas acompañaron. El equipo actuó rápido. "Tuvimos que decidir en el momento", dijeron.
Las imágenes tomadas impactan. Muestran criaturas nunca vistas. También formaciones geológicas complejas. Todo en un estado de equilibrio absoluto.
El hallazgo ofrece pistas sobre la evolución marina. También sobre la vida en condiciones extremas. Los científicos esperan revelar más datos en los próximos meses.
La Antártida aún guarda secretos. El acceso a esas zonas es muy difícil. Pero los avances tecnológicos y los eventos naturales abren nuevas posibilidades.
El fondo marino es el ecosistema menos conocido del planeta. Cada hallazgo como este cambia el rumbo de la ciencia.
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El descubrimiento también permite estudiar los efectos del cambio climático. La fractura del hielo es una muestra de lo que ocurre en el continente blanco.
La biodiversidad observada podría estar en riesgo. El equipo advirtió que se deben proteger esos espacios. Su valor biológico es incalculable.
El océano profundo guarda las claves del futuro. También del pasado. Lo que se encuentre allí podría ayudar a entender la historia de la vida en la Tierra.
La expedición del Instituto Schmidt continuará en la región. Ya programaron nuevas inmersiones para este año.
El equipo espera volver al mismo sitio. Quieren recolectar muestras y continuar con los registros. También desean estudiar el comportamiento de esas especies.
Lo que parecía un accidente se convirtió en un descubrimiento clave. La ciencia, otra vez, avanzó por caminos inesperados.
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