

El número de víctimas por el uso de fentanilo contaminado ascendió a 90 fallecidos, según confirmaron fuentes judiciales. En las últimas horas se sumaron 14 muertes más, y los investigadores advierten que la cifra podría seguir subiendo.


La causa, a cargo del Juzgado Federal N.º 3 de La Plata, apunta a los laboratorios HLB Pharma y Ramallo por la producción de ampollas con peligrosas bacterias. El caso comenzó tras la muerte de un paciente en el Hospital Italiano de La Plata, lo que llevó a la ANMAT a retirar todos los lotes de fentanilo del mercado.
Después de tres meses de operativos, las autoridades localizaron las últimas 232 ampollas contaminadas que quedaban en el país. Pertenecían a un lote de 100.000, de los cuales se aplicaron unas 45.000 dosis en hospitales antes de detectarse la contaminación. Otro lote con problemas fue interceptado antes de su uso.
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El juez Ernesto Kreplak había anticipado que “esto no llegó a un techo” y que el número de víctimas podría aumentar. La proyección se cumplió este martes, al pasar de 76 a 90 fallecidos confirmados.
El impacto del caso no se limita a la Justicia. Familiares de las víctimas reclamaron en el Congreso declarar la emergencia sanitaria y prohibir de inmediato el uso de fentanilo adulterado. Alejandro Ayala, hermano de una de las víctimas, advirtió: “Hay que activar una emergencia sanitaria para que el fentanilo en este momento no se esté usando” y pidió crear con urgencia una comisión investigadora.
El fentanilo es un opioide sintético entre 50 y 100 veces más potente que la morfina, utilizado en cirugías, cuidados intensivos y pacientes con dolor crónico severo. Su potencia obliga a un control médico estricto, ya que un mínimo error en su elaboración o manipulación puede resultar letal.
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Con todas las dosis incautadas, la investigación ahora se centra en determinar cómo y dónde se produjo la contaminación, así como en identificar posibles responsabilidades penales y administrativas.
Aun con las ampollas fuera de circulación, la amenaza sigue latente. Cada día nuevos familiares consultan sobre la medicación aplicada a sus seres queridos, lo que podría revelar más casos y ampliar el alcance de una crisis sanitaria sin precedentes en el país.

















