FUERTES CAÍDA EN LAS VENTAS Y CONTRACCIÓN ECONÓMICA

Hubo una fuerte caída en las ventas en comercios minoristas según los valores dados a conocer por el Indec y corresponden a julio de este año.

ActualidadHace 3 horasSergio BustosSergio Bustos
bajan ventas
Caen las ventas.

El consumo en Argentina sufrió un nuevo golpe en julio de 2024. Las ventas en autoservicios mayoristas cayeron un 17,1% interanual, según el INDEC. Este es el peor desempeño registrado desde septiembre de 2019.

Los supermercados también mostraron cifras preocupantes. Las ventas disminuyeron un 12,3% en comparación con el mismo mes del año pasado. Respecto a junio de 2024, la caída fue del 0,1%, mostrando una tendencia constante.

El índice desestacionalizado de ventas a precios constantes cayó a niveles mínimos desde antes de la pandemia. La actividad económica general se contrajo un 1,3% en julio, según el informe del INDEC.

La crisis en el consumo está impulsada por varios factores. La inflación, los salarios deprimidos y el mayor gasto en servicios afectan el poder adquisitivo de los consumidores. Esta situación genera incertidumbre sobre la recuperación en los próximos meses.

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A pesar de leves mejoras salariales para trabajadores formales del sector privado, el impacto de la alta inflación sigue siendo abrumador. Las mejoras salariales resultan insuficientes para compensar la pérdida de poder adquisitivo.

Otro dato relevante es el cambio en los hábitos de pago. El uso de tarjetas de crédito aumentó, mientras que el uso de efectivo y otros medios de pago disminuyó. Este cambio refleja la necesidad de los consumidores de financiar sus compras.

El fenómeno del stockeo, común en épocas de alta inflación, parece haberse desvanecido. Las familias ya no tienen ingresos suficientes para realizar compras anticipadas de productos, lo que agrava la caída en las ventas.

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Los autoservicios mayoristas mostraron el mayor desplome, afectando a las familias y pequeños comerciantes. La pérdida de poder adquisitivo impacta directamente en este sector, que suele ofrecer productos a precios más bajos.

El gasto en servicios también aumentó debido a las subas tarifarias. Esto contribuyó a la contracción del consumo de bienes, profundizando la crisis. La inflación no solo afecta a los productos, sino también a los servicios básicos.

Las ventas en shoppings también se vieron afectadas. La caída en este sector muestra que la recesión alcanza todos los niveles del consumo. Ni el consumo de lujo ni el cotidiano logran escapar a la crisis económica.

El escenario económico en Argentina sigue siendo frágil. La recesión y la inflación generan un círculo vicioso que afecta a todos los sectores. Las previsiones indican que la recuperación será lenta y difícil.

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El impacto de la crisis no solo se ve en los comercios. Las familias argentinas enfrentan serias dificultades para cubrir sus necesidades básicas. El alto costo de vida genera tensiones en todos los ámbitos de la vida cotidiana.

El INDEC también reportó una caída en el uso de medios de pago alternativos. El financiamiento con tarjetas de crédito se volvió indispensable para mantener el consumo. Esto refleja la falta de liquidez en los hogares.

La crisis del consumo no parece tener una solución a corto plazo. La incertidumbre económica y la falta de confianza en el mercado afectan la capacidad de recuperación. Las familias ajustan cada vez más su presupuesto.

Finalmente, los expertos coinciden en que la crisis del consumo se mantendrá mientras la inflación no ceda. Sin medidas que frenen el alza de precios y mejoren los salarios reales, la recuperación será difícil de alcanzar.

   

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