


El presidente Javier Milei volvió a cruzar públicamente al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en el marco de la creciente preocupación por la ola de inseguridad que sacude al territorio bonaerense. En una carta abierta publicada en su cuenta de X (ex Twitter), Milei calificó la situación como un “baño de sangre” y acusó a Kicillof de aplicar una política de seguridad “prodelincuente” basada en la doctrina de Eugenio Zaffaroni.
En el mensaje, el jefe de Estado criticó duramente la gestión provincial y lanzó una controvertida propuesta: “Si le interesa el bienestar de los bonaerenses, córrase del camino, renuncie y déjenos intervenir la Provincia”.
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La publicación de Milei se da en un contexto de creciente malestar social ante los recientes episodios delictivos en el conurbano bonaerense. El brutal asesinato de Kim Gómez, la niña de 7 años que murió arrastrada por delincuentes en La Plata, y el homicidio de Lucas Díaz, el joven de 21 años asesinado en Tortuguitas, generaron una ola de protestas vecinales y un fuerte cuestionamiento a la gestión de Kicillof en materia de seguridad.
El gobernador había evitado un pronunciamiento inmediato tras la muerte de Kim, y cuando finalmente habló, apuntó contra la Justicia y contra el Gobierno nacional por el recorte de fondos. Además, acusó a la oposición de “lucrar con el dolor”.
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Milei no tardó en responder y, en su publicación de este viernes, remarcó que su administración tiene una visión completamente distinta sobre la inseguridad y aseguró que, de quedar el manejo en manos de la Nación, la violencia se acabaría en un año.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, también cargó contra Kicillof y lo acusó de tener una filosofía que protege a los delincuentes en lugar de a las víctimas. Según la funcionaria, la administración provincial no toma las medidas necesarias para enfrentar el problema, lo que deja a los bonaerenses "enjaulados y desprotegidos”.
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Por su parte, el ministro de Defensa, Luis Petri, aseguró que los ciudadanos de la provincia “viven con miedo mientras el gobierno bonaerense los abandona”.
Las recientes muertes por hechos de inseguridad desataron una ola de indignación que se tradujo en múltiples protestas en distintos puntos de la provincia. En Tortuguitas, familiares y vecinos de Lucas Díaz se movilizaron para exigir justicia y mayor presencia policial. Una manifestación similar se llevó a cabo en La Plata, donde la comunidad exigió respuestas tras el crimen de Kim Gómez.







